Vivir en una comunidad de vecinos es
muchas veces complicado, pues conlleva llegar a un acuerdo con un gran
número de personas sobre temas muy importantes en relación a tu vivienda y las zonas comunes.
LO QUE DEBES SABER... |
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Vivir en una comunidad de vecinos puede
traer más de un quebradero de cabeza a sus integrantes, pero la
realidad es que ser miembro de una conlleva también beneficios, no solo
con el dinero, sino con respecto a otros muchos factores. En la
actualidad es una de las formas de vivir más recomendables si queréis
ahorraros dinero y tener una casa en unas condiciones más que
aceptables.
El presidente de la comunidad
Entre las cosas más destacadas de una comunidad de vecinos está el hecho de que tienes unas leyes básicas que regulan el funcionamiento de la comunidad y que se recogen en los estatutos, para que los miembros puedan vivir en paz y armonía.
Ante la gestión de problemas siempre podrás acudir al presidente de la comunidad o al administrador para la resolución de conflictos entre vecinos.
Tener un administrador de fincas tiene sus ventajas, ya que ayuda en la revisión y redacción de todos los documentos, si necesitáis asesoramiento legal os podrá ayudar, y lo más importante, sabe sacarle el máximo partido a los presupuestos de la comunidad y os informará de todo lo que ocurre.
Sirve realmente como un elemento socializador, pues te obliga a vivir y relacionarte con muchas otras personas. Depende en que comunidad de propietarios viváis, podéis encontraros hasta con comunidades muy unidas, donde celebran fiestas conjuntas o realizan actividades como rastrillos.
Zonas comunes
El contar con estas relaciones personales os ayudará además a resolver los conflictos de forma más pausada y en caso de necesitar ayuda, sabéis que será más fácil pedirla a personas con las que tienes una estrecha relación.
Tenéis la posibilidad de disfrutar de elementos comunes que de otra forma no podríais tener o te saldría realmente caro. En un edificio, urbanización o complejo existen instalaciones o servicios que son comunes a todos los vecinos y otros que son exclusivos del propietario. Por esta razón podéis compartir los gastos de los asuntos comunes y disfrutar de una zona cerrada, un portero que atienda la seguridad de la zona, una zona ajardinada que es cuidada por un jardinero, un garaje, piscina, parque para niños...
Todo esto lo podéis disfrutar a un bajo precio, algo que viviendo solos tendríais que hacer frente a los gastos vosotros mismos. Este es seguramente el punto más importante a la hora de elegir vivir en comunidad, su bajo coste.
Fuente: Mapfre.com
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