Cómo mantener en perfecto estado las zonas comunes en edificios y urbanizaciones

La importancia de la limpieza en una comunidad de vecinos es un aspecto fundamental a la hora de garantizar la seguridad y crear un ambiente bueno de convivencia vecinal. Además, mantener limpios y en buen estado dichas zonas comunes, favorece que la vivienda se revalorice y a mantener su precio en el mercado.





No es lo mismo que un portal esté descuidado y sucio, o en mal estado a la hora de vender una vivienda, ya que la imagen no será la misma que si está todo limpio y bien cuidado. Al cualquier miembro de la comunidad le gusta disfrutar de unas zonas comunes limpias y cuidadas.

Hoy día, lo habitual es que las comunidades de vecinos tengan varias zonas comunes y cada una de ellas requiere de un mantenimiento específico. Por ejemplo, las zonas de jardín, piscinas, garajes comunitarios, pistas deportivas, zona juego infantil o gimnasio. Además de las zonas habituales como son las escaleras, portal, o pasillos. Todas ellas deben tener un mantenimiento de limpieza regularmente y tener una limpieza que asegure las condiciones higiénicas y de confort.

Se trata de un intenso trabajo que se recomienza que se realice a través de los servicios de una empresa especializada en limpieza y mantenimiento de comunidades que aseguro que todos los elementos de la comunidad está perfectamente cuidados y limpios. Lo ideal es contar con una empresa que ofrezca servicios integrales de limpieza que nos asegure que cuenta con un equipo ´técnico y humano que sepa realizar todos los trabajos que necesita la comunidad.

Es imprescindible además, asegurarnos que la empresa cuenta con los protocolos de seguridad necesarios para la realización de los trabajos, así como que sus trabajadores estén perfectamente formados y equipados para desempeñar dichas tareas en condiciones óptimas de seguridad.




En este sentido, la empresa contratada llevará a cabo una serie de inspecciones que consistirán en la revisión de todos los elementos de la comunidad. Desde las instalaciones técnicas como tuberías, instalación eléctrica, elementos de seguridad, canalones, etc. a las que solo necesitan una inspección visual como suelos, escaleras y el resto de instalaciones. Por ello es fundamental realizar una inspección previa detallada que defina correctamente todos los trabajos y establezca un calendario de actuaciones de limpieza y mantenimiento detallado. En este calendario se definen cuatro áreas básicas:
Limpieza a diario
En todas las comunidades hay zonas que se usan a diario, por ello las tareas de limpieza deben realizarse diariamente. Por ejemplo las zonas de portales necesitan ser limpiadas diariamente (barrido, fregado, repaso de cristales, buzones, puertas y ascensores)
Limpiezas semanales
Semanalmente se deben limpiar las rampas de acceso y salida del garaje; así como el barrido del suelo y la limpieza de los baños del mismo, si los hubiera.

Actividades de mantenimiento periódicas
La frecuencia de estos trabajos dependerá del uso de determinadas instalaciones, así como de los materiales a tratar.
·         Entre estas podemos encontrar el abrillantado y pulido de suelos, ya sean de mármol, piedra, madera natural, etc.
·         Barrido y fregado mecánico de suelos del garaje.
·         Limpieza en profundidad de suelos, paredes y techos de todas las zonas comunes no citadas anteriormente.

Actuaciones de temporada

Antes del invierno hay que revisar el sistema de conducción de agua caliente y calefacción central si la hubiera. También es un buen momento para la limpieza de arquetas y sistemas de canalización de aguas pluviales, tanto de canalones como de bajantes.

Antes de la primavera se debe poner en marcha un trabajo preventivo para plagas; tanto de insectos como de roedores. Así como realizar el respectivo tratamiento fito-sanitario en arboles proclives a ciertas plagas de insectos, como los pinos o las palmeras.

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